El (dudoso) encanto de las noticias de post-Cuba
Jorge Ferrer - 11/01/12Categoría: Agua corriente, Poscomunismo

Ulises Rosales del Toro y Lindiwe Sisulu firmaron esta mañana un convenio de cooperación militar entre Cuba y Sudáfrica. En Pretoria, nada menos.
“We’re cementing that South Africa-Cuban defense cooperation”, sostuvo Sisulu, ministra de Defensa sudafricana. “They’re bringing their instructors. The main target is military health”, añadió.
Noticias como esta me producen siempre un sabroso desasosiego. Por una parte, son atractivas en términos intelectuales para quienes vivimos la Guerra fría. El tipo de atractivo que te arranca una sonrisa desganada, vaya. Una sonrisa del tipo “Yo sabía que esto al final…” Por otra, dibujan el tóxico entramado del poscastrismo. Tóxico y ventajista cuando uno sabe de general que guerreó en Argelia y Angola y ahora visita África como suerte de condecorado CEO de la primera de las dos empresas más eficaces de la isla de Cuba a cobrar en dólares por los servicios prestados antaño.
No se trata ni mucho menos de la primera intervención comercial cubana en Sudáfrica. También han trabajado antes en triangulaciones que han favorecido a países africanos que no pueden sufragar las facturas cubanas en cheques al portador. En esos casos, Cuba ponía médicos pagados con sueldos de miseria y Sudáfrica los suministros. Con todo, asesores y personal médico cubano llevan años instalados allá en busca de rands. Hace un par de años Sudáfrica condonó a La Habana una deuda de algo más de un centenar de millones de dólares en previsión de negocios futuros. Y en agradecimiento al aporte cubano en el desmontaje del ominoso régimen del Apartheid. De las facturas cobradas en Argelia y Angola se sabe y he escrito antes aquí. (Fatiguen ustedes el Archivo que ando hoy con prisas.)
Hay cocktail que La Habana sirve con más munificencia que el mojito. Y no es precisamente el Cuba Libre, ya saben. Se llama «cooperación Made in Cuba» y, oigan, rinde dividendos tan cuantiosos que pocas industrias pueden ufanarse de haber rentabilizado mejor un nombre de resonancias hispanas. Ni Mercedes Jellinek hizo más en materia de branding. La Mercedes que debió nombre a Dumas y al conde de Monte Cristo, que es, por cierto, marca cubana también y ocasionalmente, fíjate tú, con doble corona.
Este convenio militar firmado es de gran importancia…a juzgar por la larga frontera que Cuba y Sudafrica comparten…
Sabe alguien por aqui cuantos convenios y tratados han firmado los Cagastros desde 1959? quizas Robertico El Pichon de Chulo (ex-canciller) si esta leyendo esto nos pueda ayudar….
Fraternalmente y totalmente pro-libre- empresa